Los visitantes aprovechan a dar una vuelta montados en caballos de alquiler. Fotografías: Yonny Rodríguez. |
La festividad inició
este viernes 19 con las campanadas mañaneras. A las 5 de la madrugada sonaban
los antiquísimos metales, hostigados por el martillo.
Posteriormente
seguían llegando desde todas latitudes del pueblo los gremios de las iglesias a
visitar al Patrón.
El conjunto "San Juan" anima las tardes con el popular "currunchunchún". |
El fin de semana los
turistas llegaron de visita, muchos por antonomasia, otros por la invitación
que hiciera Buzón de Rodriguedades.
Hasta la fecha la
festividad se desarrolla sin novedades, aunque hay que mencionar que la misma
no cuenta con los recursos necesarios para realizarla de una manera más
festiva.
Algunos pobladores
con criterio que han llegado a vivir al pueblo se quejan de la organización y
poca promoción que se le hace, y agregan que se realiza más por no perder la
centenaria tradición que por amor a la misma. La inversión en arte y cultura en
las ferias que posee es casi nula.
La Plaza Central acoge a los visitantes los fines de semana. |
“Andamos de visita y
comprando algunas artesanías; no sabíamos que el pueblo estaba de feria”,
expresó Miguel Castellanos, arquitecto y turista capitalino.
Pese a tener diversos
atractivos como los inmuebles de valor patrimonial localizados en su Centro
Histórico edificados muchos en el siglo XVIII, la alfarería y el clima fresco, Ojojona no cuenta con voluntades sinceras
que le apuesten al arte y a la cultura.
“Ojalá mejoren las
ferias algún día, porque si usted viene al pueblo no va a ver ni un alma
durante la semana, es muerto como cualquier otro”, se quejó José Mercedes
Martínez, oriundo de El Rodeo.
También se han instalado algunos juegos para los infantes. |
La feria finaliza
este fin de semana con quemas de torofuegos, elección de la reina del
municipio, competencias deportivas y fiestas bailables, además del expendio de
las populares artesanías.
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