De un corto tiempo acá, Ojojona viene teniendo más
afluencia de turistas, por lo que es necesario el establecimiento de cafés,
galerías y restaurantes, en este sentido y hace unos cuatro años, Restaurante
La Finca abrió sus puertas.
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Restaurante La Finca está ubicado al costado izquierdo de la ermita de El Calvario, en el Centro Histórico ojojonense. |
Referido
local está dirigido por los hermanos Abel y Joel Zelaya, sin embargo hay que
agregar que en el negocio participa toda la familia, pues según las palabras de
sus dueños, “algunos parientes les suministran ciertos alimentos de los que se
consumen”.
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Seis meseras profesionales atienden a los turistas que llegan a almorzar. |
Lo destacable
de todo el engranaje que hace funcionar a La Finca es que genera catorce
empleos directos, entre cocineras y meseras.
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La tendencia colonial y cálida es evidente. |
La variedad
de comidas incluye, principalmente, el platillo especial “La Finca”, cuyos
complementos son carne de res y lomo de cerdo, acompañado de chorizo, cuajada,
frijoles fritos, arroz, plátano, chismol y tortillas. Asimismo, se sirve pollo
asado y a la plancha, fajitas de pollo y dos tipos de sopas diarias, que varían
entre de gallina india, de res o bien de mondongo.
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Los predios de La Finca permiten pasear y observar su ornamentación. |
Cuando los grupos
son grandes, se puede pedir una parrillada familiar, que dependerá del número
de personas. Las boquitas que se pueden pedir como acompañamiento a una fría
cerveza van desde anafres de nachos, platos de carne, chorizo parrillero y
pupusas.
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Espacio dedicado al Guancasco, historia y cultura de Ojojona. |
Antes de
toda esta explosión de sabor, mientras le llevan el plato a su mesa, el turista
puede visitar el área denominada “Galería Guancasco”, donde se halla una serie
de fotografías alusivas a la manifestación lúdico-religiosa, de igual manera,
ofrece otras gráficas que muestran la riqueza histórica y cultural del
municipio.
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Por su aspecto familiar y al aire libre, La Finca es muy frecuentado. |
La propuesta
de un restaurante de concepto colonial y de patio nace para suplir la necesidad
del visitante, “puesto que él viene buscando algo diferente, es decir, comer
alimentos carentes de grasa, que no sea comida rápida”, explica Abel Zelaya.
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El profesor Abel Zelaya es copropietario del restaurante. |
A todo esto
hay que agregar la zona de bar que posee La Finca, donde se sirven cervezas
nacionales y extranjeras y tragos como tequilas, rones, cervezas y margaritas.
Lo mejor de todo es que el negocio tiene servicio de POS, es decir que acepta
pago con tarjeta de crédito.
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El pollo asado a las brasas en uno de los platillos apetecidos. |
Sin
duda, entonces, coronar la visita a Ojojona con un delicioso almuerzo en la
Finca, será una gran experiencia.
GALERÍA
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Mesas al aire libre predominan en La Finca. |
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Algunos prefieren los quioscos ubicados en los patios. |
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Sin duda que los elementos que evocan lo rural llaman la atención del visitante. |
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La Finca ha destinado un área de bar también. |
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La señalética del restaurante se halla en las principales calles. |
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Fachada colonial donde se priorizan los artículos elaborados en tierra adentro. |
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"Queremos que el cliente se vaya satisfecho", expresa Abel Zelaya. |
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Algunos de los tragos que se sirven en La Finca. |
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Delicioso pan hecho en casa para disfrutar con un café. |
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Las cocinas rurales donde se preparan los alimentos. |
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Postal ruralísima, propia de los pueblos. |
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Café de palo, extraído de las montañas ojojonenses. |
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Los imperdible nachos. |
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Mediante Joel Zelaya La Finca realiza la publicidad en el Centro Histórico. |
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Don Armando Zelaya es el experto en parrilladas. |
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Artesanía nativa de Ojojona y alrededores. |
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Los pequeños aprovechan para disfrutar de las monturas. |
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Nacionales y extranjeros acuden a disfrutar a La Finca. |
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Los espacios familiares abundan. Su atención es rápida y eficiente. |
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En pareja o en grupos llegan los turistas a disfrutar del verde aire y la comida. |
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Es un negocio eminentemente familiar. Todos participan. |
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